Viajar, salir de la rutina del día a día, es una experiencia maravillosa. Pero no hay nada comparable que se haga con los compañeros y amigos.
Los días previos a la excursión a la «Casa do Queixo«, nuestros niños y niñas de 5º de Infantil ya estaban muy nerviosos, esperando impacientes un poco de normalidad, que ya tocaba después de dos años.
Y por fin llegó. Iban en el bus emocionadísimos por ver qué se iban a encontrar (algunos ni siquiera habían pisado el rural).»No sé qué me voy a encontrar en la granja, pero estoy muy feliz», es una de las frases que nos decían.
Aunque …