Un día en el vivero

«Los niños son aprendices activos, investigadores y la naturaleza ofrece una experiencia sensorial completa.” Así relataba María Montessori cómo las actividades al aire libre y el contacto directo con la naturaleza facilitan el desarrollo equilibrado y total de nuestros pequeños: fomentan el trabajo en equipo, son una fuente de influencias saludables, conciencian sobre las necesidades del entorno más cercano y son una lección constante de calma y paciencia, entre otras cosas.

Los niños y niñas de 5º de Educación Infantil disfrutaron de una jornada muy especial en nuestro vivero, donde plantaron bulbos, repollos, cebollas, brócoli…

Con mucho cuidado y afecto, descubrieron todo lo que necesitan las plantas para crecer, cada una de sus partes y los utensilios que se requieren para tan delicada labor.

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